Me gusta este trozo de mundo sobre el que están retratadas estas personas. Al tío Fernando le gustaba poner a los personajes en el centro del riato para retratarlos a contra luz del saliente. ¡Qué sabor a pueblo rezuma la imagen!. El riato ancho. El riato silente, no hay coches ni se les espera. Dos paisanos andan confianzudos por el medio la carretera. Las cunetas terrizas. Los ramazos de los acacios desnudos ascendiendo hacia el lechoso cielo del invierno.El pueblo que acaba donde mueren los árboles.Los puentes de cemento para facilitar el acceso a las casas. Las casa más vieja del pueblo: el mesón. Era el tiempo en que las casas tenían las puertas abiertas y los Ramírez sólo eran los Rescuñas. Luis Chichones
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Me gusta este trozo de mundo sobre el que están retratadas estas personas. Al tío Fernando le gustaba poner a los personajes en el centro del riato para retratarlos a contra luz del saliente. ¡Qué sabor a pueblo rezuma la imagen!. El riato ancho. El riato silente, no hay coches ni se les espera. Dos paisanos andan confianzudos por el medio la carretera. Las cunetas terrizas. Los ramazos de los acacios desnudos ascendiendo hacia el lechoso cielo del invierno.El pueblo que acaba donde mueren los árboles.Los puentes de cemento para facilitar el acceso a las casas. Las casa más vieja del pueblo: el mesón. Era el tiempo en que las casas tenían las puertas abiertas y los Ramírez sólo eran los Rescuñas. Luis Chichones
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